Es importante señalar que el estilo de
liderazgo que se ejerza por parte de los directivos o alta gerencia influye
directamente en la toma de decisiones que se llevan a cabo dentro de la
organización. Ante ambientes tan poco estables y la imposibilidad de actuar a
ciegas, deben interpretar grandes cantidades de información para poder cumplir
con una de sus funciones que es la toma de decisiones; la cual deberá ser lo
más confiable, acertada y soportada en el análisis de información.
Sabido es, que las tradiciones, los
hábitos, las costumbres, la propia intuición y experiencias de un directivo
desempeñan una función importante en la forma en que los problemas se
solucionan.
Las decisiones basadas en el conocimiento
serán la base del crecimiento y desarrollo de la organización. Quien toma una
decisión debe identificar todas las alternativas disponibles, contemplar las
consecuencias y evaluarlas de acuerdo a los objetivos y metas que se tengan que
cumplir.
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